Las más versátiles y polivalentes motos de enduro de la firma transalpina se renuevan de manera sustancial de cara a la temporada que viene. Dentro del catálogo de la marca, la gama Beta Xtrainer 2025 se coloca como una opción que abarca a todo tipo de usuarios, desde los más inexpertos y tranquilos, hasta los más exigentes y avezados.
En los últimos años, Beta ha vuelto a erigirse como una de las marcas más representativas del mundo off-road y por lo que parece, con esta evolución (casi revolución) de su familia Xtrainer no pretende desprenderse de esa batuta en mucho tiempo. Para 2025 las Xtrainer 250 y 300 reciben multitud de cambios en todos los ámbitos, muchos de ellos de gran importancia.
El primero, y más evidente, es la actualización de colores en su carrocería, dejando atrás el full red de las versiones anteriores y dando la bienvenida a una sofisticada y audaz combinación de gris con rojo. Esta nueva imagen, además de darnos a entender la gran diferencia entre las dos generaciones, también distingue a la gama Beta Xtrainer 2025 del resto de sus compañeras de enduro.
La gama Beta Xtrainer 2025 incorpora de serie la llave electrónica y el sistema antirrobo
Históricamente, las Xtrainer han destacado por su gran polivalencia, siendo motos sencillas e intuitivas, pero también resolutivas y exigentes si las circunstancias o el usuario lo requieren. Para ello, uno de los puntos a destacar es la combinación de elementos sencillos pero muy eficientes en todo el conjunto.
Otro punto fuerte que se mantiene en la nueva generación es el reducido peso del conjunto, siendo de 99 kg en total, algo que influye directamente en su manejabilidad y facilidad de conducción. Esto, unido a un nuevo sillín 20 mm más bajo que en la gama RR, que introduce una nueva espuma en su interior más suave, mejora ostensiblemente la comodidad y la maniobrabilidad de las nuevas Xtrainer 2025.
Lógicamente, la parte mecánica también debe estar a la altura de las mejoras y el resto del conjunto, y en los dos casos (la versión de 250 c.c. y de 300 c.c.) los monocilíndricos ofrecen una entrega de potencia suave y progresiva. Asistidos en todo momento por los diferentes mapas de motor y el avanzado sistema Beta Progressive Valve, de válvula de escape regulable, con el que el usuario puede configurar a su gusto o necesidades las prestaciones del propulsor en todo momento.
En la parte ciclo tampoco se ha escatimado en esfuerzos y en la calidad de sus componentes, entre los que destacamos la horquilla de 43 mm regulable en precarga y extensión; y el amortiguador trasero que ofrece los mismos ajustes y añade también el de compresión. Nissin firma el sistema de frenos con un disco por eje, siendo de 260 mm el delantero y de 240 mm el trasero.
Por último, aunque no es una novedad en estos nuevos modelos, no podemos dejar de mencionar el sistema de llave electrónica que incorpora de serie toda la gama. Este sistema, que consta de una llave magnética que va unida al manillar y a la muñeca del conductor, apaga el motor en caso de caída y además tiene la función de sistema antirrobo, ya que si no está conectado, la moto no arranca.
Las motos más polivalentes de enduro de la marca de Rignano sull’Arno, estarán disponibles en la red de concesionarios oficiales a finales de este mismo mes de junio. De momento no se han publicado los precios, pero no tardaremos en conocerlos.