Existen trenes que pasan una sola vez en la vida y que si no te subes a ellos puede que no vuelvas a tener una oportunidad igual. Pues algo así es lo que ocurre con esta impresionante Ducati 999R FILA del año 2003 que está a la venta y la cual no ha recorrido ni un solo kilómetro en sus más de 20 años de vida.
Esta edición especial de la marca de Borgo Panigale fue lanzada para conmemorar las 200 victorias conseguidas por Ducati en el WSBK, de ahí que tan solo salieran 200 unidades a la venta a nivel mundial. Este modelo emblemático levantaba pasiones entre los aficionados al motociclismo en su momento y hoy en día levanta más aún si cabe, sobre todo sabiendo que a pesar de los años está completamente nueva.
Esta edición limitada italiana, que está a la altura de otras lanzadas por la firma italiana, la están vendiendo los chicos de la casa de subastas norteamericana de Iconic Motorbike Auctions. En un principio, de las 200 unidades 75 se reservaron para su venta en Estados Unidos, pero según los datos parece que tan solo llegaron 67. Esta unidad en concreto es la número 5 de las dos centenas fabricadas y como curiosidad debemos decir que las diez primeras se entregaron a sus clientes sin los adhesivos FILA adheridos al carenado, era el cliente quien los tenía que pegar.
La Ducati 999R FILA es más potente y ligera que el modelo base
A diferencia de muchas de las ediciones especiales que algunas marcas lanzan hoy en día (Ducati entre ellas), la Ducati 999R FILA no solo tenía mejoras a nivel visual. Esta superbike también recibió unos cuantos cambios que afectaban a su rendimiento y su comportamiento, algunos de ellos derivados directamente de la moto que competía en el Mundial de Superbikes de la época.
Puede que los más destacables sean la mejora en el motor L-Twin italiano -que supuso un incremento de potencia de 10 CV respecto al modelo estándar, elevándola a 146 CV finales- y el montar un basculante reforzado similar al del modelo de competición. Por otro lado, la fibra de carbono es la gran protagonista en todo el carenado de esta superdeportiva, lo cual aligera el peso del conjunto, algo en lo que también ayudan otras piezas de magnesio y las llantas de aluminio.
Al kit que llegaba con la moto se le añadió una ECU de competición aparte y también un sistema de escape de alto rendimiento fabricado en titanio. Como es normal en estos casos, también venían los documentos que acreditan la exclusividad y el certificado de autenticidad de la moto, un set de herramientas Ducati, adhesivos adicionales y algo muy curioso, una chaqueta y un pantalón personalizados para la ocasión.
Esta joya única de la firma transalpina ha alcanzado por el momento un valor de 30.000 € en su puja más alta. Aunque quedan todavía varios días para poder hacerse con ella y seguro que estás cifras no son las definitivas.
